En mayo el equipo de la Corporación de Desarrollo Araucanía estuvo en una charla masiva con emprendedores de Toltén. En esa instancia, informativa y vinculante, el área de proyectos de la entidad conoció el trabajo en fibra vegetal que desarrollaban las vecinas del sector y, de inmediato, nació una iniciativa que hoy, pocos meses después, se transformó en una realidad: la comuna cuenta con 17 nuevas mujeres capacitadas en asesoría especializada en rescate de artesanía en fibra vegetal y línea de productos con identidad.

El trabajo asociativo entre la entidad regional, la Municipalidad de Toltén y la Universidad Autónoma de Chile, sede Temuco, tenía como objetivo unir esfuerzo y articular un proyecto que brinde oportunidad de desarrollo a las mujeres de la comuna en una actividad ancestral como lo es la artesanía en fibra vegetal, el que fue finalizado con una significativa ceremonia donde participaron autoridades y también las mujeres que lideran este novedoso proceso.

“Las grandes iniciativas surgen de forma inesperada, por coincidencias. Y fue así como implementamos un curso en cestería en fibra vegetal que es propio del material natural de la comuna de Toltén. 42 horas cronológicas para nivelar conocimientos de 17 emprendedores y que hoy nos permite mirar con proyección el futuro, construyendo un producto con fuerte identidad local, que pueda ser reconocido en toda la región y el país. El talento existe, la materia prima también y el deseo de asociarnos con estos elementos con denominación de origen nos tiene contentos y esperanzados”, explicó la primera autoridad comunal, Guillermo Martínez, quien agradeció el apoyo de la corporación y  de la casa de estudios en todo el proceso.

Alianza virtuosa

A través del Centro de Emprendimiento de la Universidad Autónoma, las emprendedoras de Toltén sumaron conocimientos con el objetivo de desarrollar una producción de cestería de alta calidad, con identidad territorial y que ponga en valor el patrimonio natural y cultural de la ruta Lafkenche.Así lo reconoció la directora del área, Rosa Cañiumil, quien alabó el proceso logrado por las mujeres de la comuna.

“Cuando asumimos este desafío como universidad estábamos muy contentos por dos motivos: el primero porque la Universidad Autónoma de Chile, sede Temuco, busca trabajar con y por el territorio y evidentemente estas iniciativas contribuyen al desarrollo local. En segunda instancia porque nuestro centro tiene un enfoque dirigido al fortalecimiento de emprendimientos de pueblos originarios. Por lo mismo, este grupo de mujeres tenían condiciones adquiridas de manera innata producto de las características del territorio, lo que propició un encadenamiento ameno y fácil para generar el proceso de aprendizaje. Los productos obtenidos, por ser la primera clase, sobresalen en su calidad”, afirmó Cañiumil, quien mira el futuro con optimismo. “Debemos pensar esta iniciativa como una fuente de ingreso”, añadió.

Por su parte, Jacqueline Antillanca es una de las 17 mujeres capacitadas y se mostró feliz por los conocimientos sumados y el significado que puede tener en un futuro cercano.

“Entré por una selección sin saber absolutamente nada. Soy artesana en genero y no tenía mayor aprendizaje en artesanía en fibra y fue una experiencia maravillosa para darme cuenta las capacidades que tengo como mujer para poder lograr estos productos que identifican mi comuna”, desatacó la emprendedora, quien se sumó al reconocimiento a la Corporación de Desarrollo Araucanía por visualizar una gran oportunidad de crecimiento.